En la excelente charla entre Vilas y Cercas en Oviedo hace unos meses, pero que parecen otra vida y otro mundo, Vilas dijo de manera muy simpática, eso de que hay que remunerar a los escritores, si no queremos escritores domingueros.
Yo no los quiero, desde luego. Domingueros en nada, sino profesionales.
Y para eso, tienen que poder vivir de ello. En caso contrario, los vamos a perder. Y la literatura tiene que sobrevivir. Creo que lo hará, pero no sé si lo creo porque a mí me interesa y me gusta.
Es una cuestión de dignidad humana y profesional. No creo que nadie pueda pensar lo contrario.
Lo explica muy bien este texto.