jueves, 22 de diciembre de 2016

¡Feliz Navidad y todo lo mejor para 2017!

Le dejo, amable lector, una frase de Mario Benedetti: 

"No te rindas que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños, destrabar el tiempo, correr los escombros y destapar el cielo". 

Muy bella frase, aunque cuando los años pasan y pesan, las ganas de seguir peleando van mermando, sobre todo, si una vive instalada en un trabajo que si se quiere, puede ser muy cómodo además de estable si se ha logrado la condición de funcionario. Y si no, ya son ganas de complicarse la vida con nuevos retos, y nuevos sueños....

Me gusta mucho esta otra frase. Creo que es de "El Quijote" y la tengo en la galería de mi casa, donde escucho música. Lo compré en Toledo, el azulejo. 


La música siempre viene bien. La buena, claro está. Ahí va un bello fragmento...


                                           ¡Feliz Navidad!
Aquí mi acebo, cargado de frutos rojos en este época del año.
Este blog se toma un descanso hasta el año que viene...Pásenlo bien. 


Lady Susan

Una amiga me avisó del estreno de esta película. Está basada en uno de mis libros favoritos de Jane Austen. Me la he perdido. Me temo que estoy mucho más al día de estrenos infantiles, incluidos los sucesivos pestiños de la Guerra de las Galaxias. ¡Qué le vamos a hacer!. 
Es lo que toca en cada etapa de la vida...

A ver si la puedo ver un día. No tiene mala pinta. Releeré antes el libro.


martes, 20 de diciembre de 2016

De Guindos, o el sentido común ministerial

           Este artículo fue publicado en el diario EL COMERCIO el 13/12/16

Un día de asueto del puente de diciembre, lo puede aprovechar una para hacer tareas pendientes por casa o para escuchar al completo las declaraciones del ministro de Economía. O, si es mujer, para hacer ambas cosas a la vez. ¡Y qué tranquila se queda una limpiando los armarios de la cocina, al saber que alguien como De Guindos defiende nuestros intereses económicos en Europa! Este hombre representa el economista que a mí me hubiera gustado ser y está bien tener referentes en la vida. En una reciente rueda de prensa, De Guindos relató su periplo tras dos sesiones maratonianas de reuniones en Bruselas junto al resto de ministros de Finanzas del euro y la UE (Eurogrupo y Econfin, respectivamente). Hay quien lo define como un chulo; pues ni idea de si es así, o no. Tampoco me importa y no hay nadie perfecto en este mundo. A mí lo que me preocupa es que haga bien su trabajo, por la cuenta que nos tiene a los españoles. Creo sinceramente que lo hace, lo mejor que puede y que le dejan, y que gracias a él y a su ministerio, las cosas nos pueden ir a los españoles un poco mejor cada día. No es nada fácil presentarse allí y realizar una contundente defensa de la banca española, explicar que nuestro sistema financiero está en mejores condiciones que hace cuatro o cinco años; relatar que se ha inyectado capital y se ha llevado a cabo la reestructuración y luego la consolidación, que se ha creado el “banco malo” y que con todas esas medidas las incertidumbres que sobrevuelan Europa hacen más llevadero su efecto en nuestro país. No es poco lo que ha logrado desde su acceso al cargo en la anterior legislatura. De hecho, tan contento y satisfecho quedó de ello que nos lo contó en un libro: “España amenazada: De cómo evitamos el rescate y la economía recuperó el crecimiento”, que podrá sonar a autobombo, pero lo hizo.
 Hay políticos que no dan la talla y se retratan cada día pero no es menos cierto que, de vez en cuando, hay personas que se ganan a pulso el respeto por el trabajo que hacen. Me parece justo reconocerlo. Resulta que Bill Gates estos días está descubriendo que Adolfo Suárez fue un líder transformador y lo sitúa a la altura de De Gaulle. Tuvimos la suerte de tener buenos políticos durante la transición a la democracia. No todos los que ocupan cargos ministeriales ni ejercen de diputados actualmente llegan a la altura de aquellos políticos pero cuando aparece alguno, creo que es de justicia valorarlo. De Guindos dijo, al final de la anterior legislatura, que no quería repetir como ministro y estoy segura de que lo decía convencido. Luego le llegó una prórroga en funciones, con la que nadie contaba y después, le animaron a cambiar de idea y se dejó querer. Me alegro. Rectificar es de sabios y creo que todos salimos ganando con ello. En este país hemos sufrido a Bibiana Aído y a otros tantos de cuyo nombre no me quiero acordar y que le hacen pensar a una eso de que “a ministro puede llegar cualquiera”. Pero siempre hay excepciones que confirman la regla y para mí, De Guindos lo es. Estos días están poniendo a caer de una burra a Trueba, el director de cine, por unas inoportunas declaraciones. Supongo que todos hemos perdido, en alguna ocasión, la estupenda oportunidad de quedarnos callados y tal cosa nos pesa como una losa. Seguro que a Trueba también porque le va a pesar mucho a su nueva película pero es un cineasta que dice cosas muy sensatas como que todos debemos estar bien preparados para el cargo que ejercemos. Afortunadamente para la economía española, De Guindos se queda cuatro años más. Al menos eso espero yo, amable lector. No puedo ocultar mis debilidades, incluidas las ministeriales. ¡Qué le voy a hacer!

domingo, 18 de diciembre de 2016

La tierra de las flores, de la luz y del amor...

De nuevo en Valencia. Esta vez para formar parte del Tribunal de una tesis doctoral, en mi campo de investigación. 
Desde mi hotel, observo la Ciudad de las Artes y las Ciencias y pienso en su cuantioso presupuesto y lo mucho que cuesta su mantenimiento. 
Se me viene a la mente lo que preguntaría mi abuela, acerca de Calatrava: "Y este señor, ¿por qué no está preso?". 



jueves, 15 de diciembre de 2016

Mirlo blanco, cisne negro

El pasado martes y 13 de diciembre asistí encantada a la presentación del último libro de Juan Manuel de Prada, invitada por la dirección de EL COMERCIO. El acto tuvo lugar en el bello marco de la Colegiata de San Juan Bautista de Gijón y estaba organizado por el Ateneo Jovellanos y el Aula de Cultura de EL COMERCIO. 
Para la presentación se utilizó el formato de entrevista con Alberto Piquero y Miguel Rojo. Una lástima que el primero abusara de su tiempo de forma tan descarada. Hasta el propio Juan Manuel le llamó educadísimamente la atención, indicándole que no iba a quedar tiempo para el otro entrevistador. Es curioso que en la presentación de una novela que precisamente trata de vanidades literarias, el entrevistador, no el autor, tome más tiempo para dejar constancia de su criterio o de que ha leído la obra. En fin....Paciencia. Es lo que hay, mucha vanidad literaria y, en algún caso, totalmente injustificada. 
Me quedo con lo mejor del acto. La voz balsámica de su autor, explicándonos su obra y cómo le llegó su pasión y vocación por la literatura. 
Preparada estoy para leer su nueva obra. Esta tarde me voy de viaje, así que se viene conmigo...



Aquí una foto desde mi asiento. 



Mejor foto en la Crónica de EL COMERCIO, sobre el evento. Aquí se la dejo, amable lector. 
http://www.elcomercio.es/culturas/libros/201612/14/juan-manuel-prada-literatura-20161214002918-v.html

He descubierto que tengo una cosa en común con Juan Manuel de Prada. El que no se consuela es porque no quiere. La fecha de nacimiento. Ambos somos de 1970. Buena cosecha, je, je....


lunes, 12 de diciembre de 2016

I Capuleti e I Montecchi

Se ha estrenado en Oviedo este fin de semana la ópera de Bellini "I Capuleti e I Montecchi", versión operística del drama de Romeo y Julieta. Preciosa la portada del libreto que me entregaron junto con las entradas, en palco de platea. 



Imprescindible en el Intermezzo tomar un vinito en el Ópera Café. Esto nos cuenta el espejito del baño de señoras, no apto para señores...



Le dejo, amable lector, un versión grabada en Nápoles en 1995. En la representación de Oviedo, la imagen final de la escenografía me resultó impactante. No lo voy a desvelar. ¡Anímese a asistir!  





Oviedo celebró una nueva ópera y yo, 16 años de matrimonio, desde el 09/12/2000, que se dice pronto.

viernes, 9 de diciembre de 2016

Susanna

                  Este artículo fue publicado en el diario EL COMERCIO el 07/12/16

Como lectora habitual de EL COMERCIO, me permito opinar de los que opinan habitualmente en las publicaciones que acompañan este diario, por si tuviera algún interés para el amable lector. Yo diría que Juan Manuel de Prada es una voz absolutamente imprescindible en este país. De él admiro su prosa barroca, cada vez menos a mi pesar, sus golosos adjetivos, esa densidad en sus textos, propia de un escritor de peso. Y es que una cosa es rellenar una cuartilla con letras, lo hace un “juntaletras” y otra, bien distinta, ser un auténtico escritor. Con sus opiniones puedo no estar de acuerdo pero siempre me hacen reflexionar. En cuanto a Pérez-Reverte pues lo leo, sin más. Predica desde su púlpito, con patente de corso, pero a mí, sinceramente, me resultaban más entretenidos los sermones de los curas de la capilla de mi colegio. Aprendías algo con ellos. Pérez-Reverte sermonea con frecuencia en modo soez. ¿De veras un académico de la lengua tiene que usar tal plaga de palabras malsonantes para atraer la atención del lector? No sé si pretende que aprendamos, con sus lecciones de historia de España. Mejor un buen libro, creo yo. Él lo hace para rellenar semanalmente una hoja del suplemento dominical. Se conoce que anda escaso de temas. Eso sí, siempre intentando sembrar polémica, que bien que le gusta, para mantenerse en el candelero o, como decía la olvidada Sofía Mazagatos, en el candelabro. Moriré sin entender la razón de su éxito. Javier Marías, creo que amigo suyo, sí que me parece otro de los imprescindibles. Suelo coincidir con él en opinión y admiro desde su escritura hasta su talla intelectual. Tengo una amiga que no lo soporta porque dice que es un pedante. Lo ignoro, si lo es o no, pues no lo conozco de nada y entiendo que por un lado está la persona y, por otro, el personaje. A mí no me parece pedante pero, aunque así fuera, no me resultaría molesto porque yo, a una mente brillante le perdono prácticamente cualquier cosa.

Por el lado femenino, una de las grandes es, sin duda, Carmen Posadas. Me enganchó en un libro sobre una Otero que armó de las suyas en la Belle Époque en París y, desde entonces, leo siempre sus opiniones, preñadas de sensatez y bien escritas. Muy solvente y siempre en su línea viajera y solidaria está Cristina Morató. Todo lo contrario que Edurne Uriarte. Antes de leerla me pregunto, ¿con qué nuevo fascículo de su versión cargante del feminismo va a atacar al lector esta vez? “Liberando a la mujer” sería su bandera, pero con su imagen de fashion victim, esclava del último modelo de algún gran diseñador. Nos ha hablado de sus bolsos carísimos y de los accidentes de los camareros al servirle el vino, sobre tan preciado artículo de lujo. ¡Qué gran drama para la humanidad! También tenemos a Julia Navarro, al parecer escritora de éxito. Yo leo sus opiniones y me digo: “ni fu, ni fa”. Gramaticalmente correctos pero nada del otro jueves; no nos descubre el Mediterráneo, precisamente. Me regalaron su “Historia de un Canalla”: ¡863 páginas! Tengo pendiente de releer “Los hermanos Karamazov”, una novela grandiosa donde las haya y prefiero volver a dedicarle el tiempo a Dostoyevski que a ella, porque me temo que si leo esas 863 páginas no me compensarán el tiempo empleado y me llevarán a decir: “ni fu, ni fa”. He de buscarle una utilidad al novelón. Tengo la librería desbordada así que tal vez lo use de reposapiés para el pie izquierdo de mi hijo pianista, cuando toca la guitarra. Y hablando de hijos, tenemos a Care Santos, que en sus escritos nos muestra el esfuerzo épico que representa trabajar y criar hijos, ¡como si fuera la única! Huyo de sus artículos como de la peste bubónica porque no tengo ganas de que nadie me cuente el número de lavadoras que pone a la semana. Le aseguro que lo he leído en una de sus contribuciones de tirada nacional. Y entre tanto desierto, aparece como un oasis Susanna Tamaro. Ante todo, una mujer con personalidad. Coincidí con la que fue mi profesora de italiano muchos años, Pierangela, natural del Piamonte italiano, también gran aficionada a la literatura, en que “Va´ dove ti porta il cuore” no se cuenta entre nuestros libros favoritos. Sin embargo, sus artículos son un regalo para mí. Espero ansiosa su llegada. Me parece una buena escritora y una mejor articulista. Es una mujer brillante y con personalidad. Sin rastro de aborregamiento femenino en sus opiniones. Tengo muchos de sus artículos guardados pero hay uno que me marcó especialmente. Se titula “¡Una niña!” (Mujer Hoy, nº 874, 09/01/2016) y me chocó mucho que dijera que de niña no quería ser precisamente eso: una niña. “¿Acaso había algo más alejado de lo que yo era de verdad en mi fuero interno?”, declara. Se definía como una fiera. O directamente una tigresa (23/07/2016). ¡Cualquier lo diría!, con su cara angelical. Ella nunca quiso ser niña y otras  preferirían seguir siéndolo siempre, pero no se puede. Hay que madurar, crecer, ser esposas, madres, trabajadoras…Y convertirse en auténticas mujeres. 

domingo, 4 de diciembre de 2016

Mis músicos favoritos de Gijón

Siempre me gustaron muchísimo. Son mis músicos asturianos favoritos, y son de Gijón. Resido en esta ciudad desde hace 16 años y me sigo sintiendo ovetense de pura cepa, pero le declaro mi amor musical incondicional a estos músicos de Gijón que tan buenos ratos me hicieron pasar de jovencita con sus canciones.

Sigo sin entender la razón por la que no lograron el éxito nacional.  Actuaron hasta de teloneros de Hombres G; es como si Mozart hubiera hecho de telonero del malévolo Salieri. No niego haber bailado las tonterías del marcapasos de Marta, pero no llegaban a estos asturianos a la suela de los zapatos. Espero que les haya quedado, al menos, el consuelo de haber tenido todo el apoyo de los asturianos. Me cuento entre ellos y, desde aquí, mi pequeño homenaje a mis músicos favoritos de Gijón. Me encantaba su sonido, sus letras…que aún hoy, cuando las escucho, me siguen emocionando.

Chapeau para Los Locos!

Aunque hayan desaparecido, algunos fans siempre les recordaremos. 





Y esta otra también es muy buena...

viernes, 2 de diciembre de 2016

Campeonato Nacional de España de Ajedrez

Parece que hace nada que lo tenía colgado de mi pecho y ya se me va por esos mundos de Dios, por las Españas que decía Carlos I de España y V de Alemania a competir con niños de 12 años, a sus 9 añitos. Siete días de concentración y competición sobre esos endemoniados tableros blancos y negros, como las teclas de su piano, de mi piano...

Que te estrujes bien las neuronas, cariño mío y mucha suerte y muchos besos te manda tu madre, desde la Patria Querida. 

lunes, 28 de noviembre de 2016

Adiós, Fidel

Cuando llegó al poder prometió la luna y ha dejado el país con un paisaje lunar.


En Venezuela, no se alejan de esto.
No creo que haya ningún sistema político perfecto. La democracia no lo es, desde luego, pero es lo mejor que tenemos y, por descontado, mucho mejor que las dictaduras de cualquier signo, de derechas o de izquierdas.
Tampoco hay un sistema económico perfecto, pero hay algunos que funcionan mejor que otros porque proporcionan mayor calidad de vida a sus ciudadanos. Y estoy hablando de hechos, de datos económicos, de pruebas empíricas.
Soy investigadora y no baso mis afirmaciones en ideologías sino en datos. Y a los datos me remito.
Murió en la cama, como un dictador que tuvimos unos cuantos años por aquí…

Adiós, Fidel. 

lunes, 21 de noviembre de 2016

Economía y Música

El pasado viernes 18 de noviembre, los economistas asturianos disfrutamos de una velada deliciosa en nuestro encuentro anual. 

Tenía para mí el interés añadido de que se le otorgaba el reconocimiento del Colegio de Economistas a una figura muy importante en mi trayectoria profesional, Ana Isabel Fernández, la directora de mi tesis doctoral. 



Se reconocía con ello su brillante trayectoria profesional. Todo un ejemplo para los que somos sus discípulos. 




También pudimos disfrutar del virtuosismo de Andreas Prittwitz, acompañando a la orquesta de Cámara de Siero. 

Disfruté un montón, conjugando el interés de mi profesión, la economía, y mi pasión, la música....


jueves, 17 de noviembre de 2016

Così fan tutte...

Se representa estos días en Oviedo la ópera "Così fan tutte" de Mozart. Estará en cartel los días 13, 15, 17 y 19 de noviembre.¡He ahí la portada del libreto!. 




Esta gran comedia de enredos se convierte en una radiografía social: todo cambia, se precipita y se resuelve en sólo 24 horas. ¿Dónde están el amor, la fidelidad, la confianza, la esperanza?

Orgullosa como siempre de actuar de mecenas de la ópera de mi ciudad natal. 



Le dejo una versión del gran Muti...
No se pierda la del Campoamor. 






martes, 15 de noviembre de 2016

Venecia es única...

Una maravilla comenzar el mes de noviembre pasando unos días de relax en Venecia, para celebrar un aniversario o una ocasión especial. 

Impactante la vista de L´Isola di San Giorgio Maggiore desde lo alto del Campanile di San Marco.



Si además de pasear, se puede disfrutar del lujo de un concierto de Vivaldi en la mismísima Iglesia de Vivaldi, la Chiesa della Pietà, mejor que mejor....Todo un lujo para los sentidos. Disfruté de jovencita un montón una versión de Trevor Picnnock de los conciertos de Vivaldi, que me regaló mi madre. 




Son divertidos los juegos de máscaras venecianas. La mía, con la imagen de uno de los puentes más emblemáticos de Venecia y una partitura musical, no podía ser otra...



Siempre Venecia. Un lugar único. No puedo evitar que me venga a la mente esta canción, cuando menciono el nombre de esta bellísima y única ciudad. 



miércoles, 2 de noviembre de 2016

Melancolía del desaparecer

Alguien tendrá que recitarla por nosotros y para nosotros, cuando hayamos muerto. 

Melancolía del desaparecer.

Y pensar que después que yo me muera,
aún surgirán mañanas luminosas,
que bajo un cielo azul, la primavera,
indiferente a mi mansión postrera,
encarnará en la seda de las rosas.
Y pensar que, desnuda, azul, lasciva,
sobre mis huesos danzará la vida,
y que habrá nuevos cielos de escarlata,
bañados por la luz del sol poniente
y noches llenas de esa luz de plata,
que inundaban mi vieja serenata,
cuando aún cantaba Dios, bajo mi frente.
Y pensar que no puedo en mi egoísmo
llevarme al sol ni al cielo en mi mortaja;
que he de marchar yo solo hacia el abismo,
y que la luna brillará lo mismo

y ya no la veré desde mi caja.
Agustín de Foxá 

Julián Iglesias, un gran maestro


                   Este artículo fue publicado en el diario EL COMERCIO el 02/11/16

La última vez que lo vi fue el pasado martes 25 de octubre, cuando entraba yo a hacer unos largos en la piscina de 50 metros del Real Grupo de Cultura Covadonga y él salía de dar su clase a los niños pertenecientes a la sección de la federación de ajedrez, entre los que se encuentra mi primer hijo. No puedo valorarle como ajedrecista por la sencilla razón de que no sé jugar al ajedrez, pero según indica la crónica de EL COMERCIO (01/11/16) destacó por su papel en este deporte: vocal de la Federación de Ajedrez del Principado, campeón de España por equipos y competidor en la división de honor. Además, tenía la titulación máxima como monitor y entrenador y, los que teníamos el privilegio de que la formación ajedrecística de nuestros hijos estuviera en sus manos, sabemos de la dedicación y entrega con la que lo hacía. Destacaba por su tesón en la organización de eventos en este deporte, animando siempre a los niños a participar, midiéndose con los demás y consigo mismos, ayudándolos sin descanso a superar nuevos retos, siempre en un clima de concordia y nobleza, la que exige este deporte. Enseñándolos a ganar y, sobre todo, a saber encajar las derrotas como caballeros y damas, que también las hay. La semana pasada nos pidió que nuestro hijo participase en el próximo Campeonato Nacional de España, pero en la categoría de Sub12 por equipos. “¡Pero si sólo tiene nueve años!”, pensé yo. Está acostumbrado a jugar con mayores, o a ganar en campeonatos del colegio con niños que le superan en edad, pero una competición nacional contra jugadores mayores, federados y muy entrenados, me parecía un reto excesivo. Dudamos un poquito, pero luego accedimos. Teníamos la plena confianza de que, en cuestión de ajedrez, Julián Iglesias sabía muy bien lo que se hacía y conocía a la perfección las capacidades y destrezas de cada niño que entrenaba. Será otro el que organice el viaje en diciembre, será otro el que les de la clase el próximo martes. Inevitablemente, se me viene a la mente el poema “La melancolía del desaparecer” de Agustín de Foxá: “Y pensar que después que yo me muera / aun surgirán mañanas luminosas”…




La vida sigue, incluso cuando la muerte llega de una forma tan abrupta, tan absurda y tan inesperada, haciendo que resulte aún más doloroso. ¡Qué faena nos has hecho Julián! Eso no se hace. Has muerto participando en un torneo de ajedrez y haciendo lo que más te gustaba. Este gran ajedrecista, allá donde esté, seguro que tiene un tablero de 64 casillas blancas y negras esperando por él, para que pueda seguir disfrutando de su pasión. Nadie ha regresado del cielo para contarnos lo que allí hay, pero estoy convencida de que es el lugar donde podremos disfrutar eternamente de nuestras verdaderas pasiones. ¿Qué otra cosa puede ser, si se llama cielo? Descanse en paz, este gran maestro del ajedrez. 



miércoles, 26 de octubre de 2016

Mi primer amor

A él le entregué mi infancia y mi juventud.......en una relación intensa, de las que marcan de por vida. 


Esta es una de las obras que más disfruté con él, en el examen de séptimo curso de piano. Aquí les dejo una versión de Barenboim, que no está nada mal. 



Sin embargo, para mi gusto, esta de Zimerman es mejor. Krystian Zimerman no es un pianista, es un dios tocando el piano. 




Espero, amable lector, que disfrute usted escuchándola, tanto como yo disfruté tocándola. 


lunes, 24 de octubre de 2016

Don Pelayo, segunda parte

Este artículo fue publicado en el diario EL COMERCIO el 17/10/16

La historia nos cuenta que Don Pelayo frenó la expansión de los musulmanes hacia el norte, comenzó la Reconquista y se le consideró tradicionalmente el fundador del Regnum Asturorum. La sabiduría popular defiende que “Asturias es España y lo demás tierra conquistada”, haciendo referencia directa al siglo VIII, cuando casi la totalidad de la península estaba invadida por los musulmanes y el cristianismo, así como los habitantes libres autóctonos de España, los visigodos, estaban refugiados en las altas montañas de Asturias. A este rey le debemos la recuperación del país. ¿Se repetirá la historia trece siglos después y se le deberá a un regente de Asturias la recuperación de este país, evitando así que vuele por los aires la nación española? Si es así, desde luego, me siento muy orgullosa de ser asturiana y me sumo al orgullo ya expresado en este aspecto por otros colaboradores de EL COMERCIO, en fechas recientes. Orgullo patrio sentí este pasado 12 de octubre, que pasé en Madrid. A algunos catalanes no les parece fiesta nacional; a mí, sí. Y ese lluvioso día madrileño no pude evitar sentir orgullo asturiano y español con fuerza redoblada.
Cuando la noche del sábado fatídico que vivió el PSOE, día del que no me quiero acordar, un periodista afín a un medio que puede ser considerado “de derechas” declaró que esa era una noche muy feliz para él, porque lo que habían hecho los barones del PSOE era evitar que Sánchez siguiera adelante con sus planes de gobierno alternativo con Podemos, con los nacionalistas y con el mismo demonio si fuera menester, con tal de ser presidente de la nación, formando un gobierno “drácula” dispuesto a todo, incluso a tolerar y aprobar referéndums que pudieran romper la nación a cambio de conseguir su voto favorable en la investidura, sencillamente no me lo creí. “Cosas del periodista con sesgo mental”, pensé para mí. Sánchez siempre me ha parecido un político bastante incapaz – a sus resultados electorales me remito – pero ni en mi peor pesadilla pude imaginar que haría algo tan diabólico con tal de presidir el país.


Sin embargo, cuando días después algunos dirigentes territoriales socialistas, creo recordar que Javier Lambán, presidente de Aragón, fue uno de ellos, afirmaron que lo que había sucedido en el PSOE tenía por objetivo frenar el potencial proceso de constitución de un gobierno alternativo que sería totalmente desastroso para España, entonces me lo creí. Y no pude más que estar de acuerdo con la afirmación de ese periodista aquel sábado noche. ¡De buena nos hemos librado! A la cabeza de la gestora del PSOE está el presidente del Principado de Asturias para poner orden en tanto entuerto. Temple no le falta a Javier Fernández, que preside un Principado, – somos Principado y el resto, territorio conquistado de comunidades autónomas –. Sea como fuere, si el Presidente del Principado logra desbloquear esta situación de falta de gobierno que sufrimos los españoles desde el pasado mes de diciembre, pues bienvenido sea y bien orgullosos que debemos estar los asturianos de que desde el norte de España se llegue a una solución para una situación tan desnortada como la que vivimos y que provoca la hilaridad internacional. Recibí a finales del verano en mi casa a una profesora de Alemania con la que mantengo mucho contacto desde mis estancias docentes en ese país y, sinceramente, los chistes que se cuentan en Alemania por nuestra situación me hicieron sonrojar. Estamos ganando a pulso que nos tomen a chirigota en el resto de Europa.
A ver si va a ser verdad que la historia se repite y que Asturias es España y todo lo demás, tierra conquistada y recuperada, que iba camino de desaparecer a causa de las malas artes de un tal Don Pedro, esperemos que cadáver político, por los siglos de los siglos, amén. Y a ver si un nuevo Don Pelayo, de apellido Fernández, nos salva del desastre. Si tal cosa logra, creo que podemos empezar a construirle una estatua en la plaza del Marqués. No estaría mal que además barriera un poquito para casa, para este territorio astur tan necesitado, a cambio del desbloqueo. Yo lo haría, amable lector. ¡Vaya que si lo haría! ¿Acaso no lo hicieron los políticos nacionalistas catalanes en el pasado, a cambio de la investidura del presidente de turno? Los mismos que ahora quieren descuartizar el país, antes le sacaban los cuartos. 


martes, 18 de octubre de 2016

¿Qué es ser libre?

      Este artículo fue publicado en el diario EL COMERCIO el 01/10/2016


“La libertad es el derecho a decirle
a los demás lo que no quieren oír”.

George Orwell

Ser libre y vivir como tal no es fácil. Es una forma de ser y de estar en el mundo y, para mí, la única posible. Y no lo digo sólo por ser una economista liberal y, sin complejos por tal cosa, sino porque libremente he elegido ser así. Las etiquetas no me gustan en exceso pero, profesionalmente, no he encontrado fruto del estudio y de mi propio trabajo un sistema que defina mejor lo que para mí funciona en economía. No me posicionaría como tal si pensase que es algo inservible o negativo para la sociedad; es, precisamente, por lo contrario. Y ese mismo pensamiento liberal que he visto y comprobado empíricamente que funciona en el marco económico es el que libremente he trasladado a mi vida. Todos tenemos ataduras y normas con las que vivir, pero no son malas si entendemos que son sanas y mejoran nuestra vida y, por supuesto, si están libremente elegidas. Hoy día, por ejemplo, hay mucha gente que decide ser “single”, vivir solos, precisamente por eso, para sentirse libres. Lo comprendo y lo respeto pero no lo quisiera para mí, sobre todo, después de haberlo elegido durante unos años en mi vida. Basta probar algo para saber si a uno le va, o no.


Sin embargo, de todas las libertades que uno se puede tomar en la vida, mi favorita es la libertad de pensamiento. Igual que para algunos el amarradero de una alianza matrimonial resultaría más pesado que un quintal, para mí, la atadura, por ejemplo, de una disciplina de partido me resultaría muy difícil de llevar, porque no hay lugar donde me sienta más libre que en mi pensamiento. Poder expresarlo libremente, cosa que no siempre es fácil, es para mí la mejor forma de ser yo misma. Nunca se puede decir de esta agua no beberé pero, sinceramente, veo muy difícil que pudiera sentirme cómoda en una disciplina mental de partido político. Y es precisamente esa falta de libertad la que, en ocasiones, trae muchos problemas y no sólo a quien no puede ejercerla, sino a mucha más gente. ¿Acaso no somos ahora todos los españoles rehenes de una situación provocada porque un montón de diputados socialdemócratas, que gustosamente se abstendrían para dejar gobernar a quien ha ganado las elecciones, no lo pueden hacer porque quedarían con ello retratados y obligados a asumir las negativas consecuencias que comportaría para ellos? Ninguno de esos diputados socialistas le puede decir a su “amado” líder, Pedro Sánchez, lo que no quiere oír. No ejercen, por tanto, la libertad que define el señor Orwell. Esa situación es algo contra-natura en un liberal porque se siente un rehén, porque pierde algo que es suyo: su propio pensamiento. La seguridad jurídica y el respeto de los derechos de propiedad son pilares fundamentales de los sistemas económicos desarrollados. Y respetar y defender lo que cada uno considera suyo es primordial en una ideología como esta. Ser libre es luchar por lo que uno cree que es suyo porque el hombre – y la mujer – que pierde lo que es suyo, amable lector, pierde su libertad. 


jueves, 13 de octubre de 2016

El Rey León en la fiesta nacional

Pasamos este 12 de octubre en Madrid, sintiendo el orgullo de ser asturianos y españoles. 

"Asturias es España y lo demás, tierra conquistada". 





Aprovechamos para ver El Rey León, ese espectáculo que deja "ojipláticos" a los niños, al menos a los míos. Muy recomendable. 


lunes, 10 de octubre de 2016

Fausto

Muy interesante la representación de la ópera “Fausto” de Charles Gounod, estrenada este pasado fin de semana en Oviedo. Brillante la actuación de  Mark S. Doss en el papel de Méphistophélès.

Fausto a Marguerite: “¿Qué desconocida turbación me invade? Siento que el amor se apodera de mí. Se adivina la presencia de un alma inocente y divina”.

Estoy orgullosa de contribuir con mi pequeño granito de arena al sostenimiento de la temporada de Ópera de mi ciudad natal.

Porque el arte, sin duda, merece ser apoyado. Sin arte, no se puede vivir. Sobre todo ARTE con mayúsculas. 




La que le dejo aquí, amable lector, no es la de Oviedo pero es una buena versión. En Oviedo estará en cartel el 9, 11, 13, 14 y 15 de octubre de 2016.

viernes, 7 de octubre de 2016

Una retirada a tiempo

Este artículo fue publicado en la Sección de Economía 
del diario EL COMERCIO el 4/10/2016


Se dice que una retirada a tiempo es una victoria. En el caso de la retirada de la salida a bolsa de Telxius por parte de Telefónica, entiendo que es más bien la cobertura de un fracaso y, en todo caso, una decisión acertada, a mi juicio, dadas las circunstancias. Cuando explico a mis alumnos las razones de una posible retirada en una OPV siempre les indico que pueden ser tres: por precio insuficiente, por demanda insuficiente o por mala coyuntura bursátil. Hoy deberíamos estar hablando de la crónica del debut bursátil de Telxius y, en su lugar, hablamos de su cancelación por la primera de las razones: precio insuficiente. Esto implica que la empresa no habría captado los fondos esperados, por lo que lo más inteligente es retirar la oferta, a la espera de un momento mejor – y aquí también entraría la tercera razón –. Tiempo habrá en el que los potenciales compradores estén dispuestos a pagar un precio superior.



Lo cierto es que Telefónica lleva un tiempo gafada con esta operación. Pretendía captar, por el método de book-building destinado exclusivamente a inversores institucionales, hasta 1500 millones de euros para sanear su deuda y las cosas no le han salido bien. La compañía había fijado una horquilla de precios para las acciones de entre 12 y 15 euros, pero las órdenes de compra que tuvieron durante el período previo de prospección de la demanda se situaban en la parte inferior de la horquilla e incluso algunas a un precio más bajo. En esta tesitura, si Telefónica hubiera querido sacar a bolsa a Telxius a toda costa en el día de ayer, podría haber rebajado el rango de precios o haber reducido el número de acciones. Cualquiera de las dos soluciones habría traído consigo una merma en los fondos obtenidos en la operación así que Teléfonica, de común acuerdo con las coordinadoras globales de la emisión, ha preferido dejarlo para otro momento. Ya pretendía haberlo hecho en julio, pero con el resultado favorable al Brexit y las consecuencias que trajo para los mercados se pensó que no era buen momento. Aparentemente las circunstancias eran algo mejores ahora pero la realidad ha confirmado que no eran suficientes los fondos que estaban dispuestos a pagar los suscriptores. José María Álvarez-Pallete, el presidente, ha tomado la decisión correcta pero el problema de la deuda sigue ahí. De hecho, las acciones de Telefónica cayeron un 4% la semana pasada como consecuencia de esta decisión. Habría sido mejor para la empresa haber obtenido la demanda suficiente a un precio adecuado y acorde con sus expectativas y también habría sido positivo para el mercado, porque la incorporación de un nuevo activo le hace ganar amplitud. En el mercado bursátil, al igual que en la vida, uno no siempre puede hacer lo que quiere, sino lo que le dejan. Ejemplos de que la terquedad termina mal, amable lector, tenemos alguno en la reciente política española, ¿verdad que sí?

Blas de Otero

A veces me cuesta entender la poesía. Sin embargo, algunos poemas me llenan y me marcan desde la primera lectura. Y los leo, y releo…y siguen teniendo sentido para mí. Nunca escribiré poesía pero algunos poemas que leo, los defino como propios. Este de Blas de Otero es uno de ellos y me gusta un montón y no por el apellido de su autor.
Aquí se lo dejo, amable lector, esperando que usted también lo disfrute. 


EN EL PRINCIPIO

Si he perdido la vida, el tiempo, todo
lo que tiré, como un anillo, al agua,
si he perdido la voz en la maleza,
me queda la palabra.

Si he sufrido la sed, el hambre, todo
lo que era mío y resultó ser nada,
si he segado las sombras en silencio,
me queda la palabra.
Si abrí los labios para ver el rostro
puro y terrible de mi patria,
si abrí los labios hasta desgarrármelos,
me queda la palabra.


Blas de Otero 




¿Por qué un blog?

La respuesta sería: ¿y por qué no? Hace un tiempo, alguien me dijo: “Señora, dice usted cosas interesantes; debería hacerse un blog”. No me lo tomé en serio. Habitualmente, me tomo más en serio las críticas que los piropos o los halagos. En aquel momento descarté totalmente la posibilidad de hacerlo. No tenía ni tiempo, ni ganas.
Sin embargo, a veces pasan cosas que te hacen cambiar de idea. Está claro que nunca se puede decir: “De esta agua, no beberé”. El tiempo, sigo sin tenerlo, pero no tener tiempo para una misma tampoco es bueno. Demasiado trabajo, demasiadas obligaciones familiares,… lo último que le queda a una mujer que trabaja dentro y fuera de casa, que está casada y tiene hijos es tiempo para sí misma. Así que no hace mucho, cambié de idea y decidí hacerme un blog con un único propósito: encontrar tiempo para mí misma. A lo mejor otras mujeres lo emplean en la peluquería; yo no voy mucho, la verdad, y esto me agrada y me llena más: escribir.
Iba a ponerle de nombre al blog “Mi torre de Marfil”, por aquello de que siempre se dice que los profesores de Universidad estamos encerrados en nuestra torre de marfil. Además, era coherente para mí porque trabajo en un edificio majestuoso, presidido por una torre. Descarté la idea porque este mundo de la blogosfera está tan poblado que ya existía un blog con esa denominación y hay que respetar los derechos de propiedad. Prescindí de lo de Marfil, que habrá quedado por ahí perdido en el mundo virtual, y decidí conservar lo de la torre, en honor al lugar donde trabajo, recientemente declarado bien de interés cultural y personalizarlo un poquito más con mi apellido favorito, en honor a la mujer que me dio la vida y que ha sido mi madre, mi padre y mi eterna amiga. Así que finalmente le quedó a mi blog el nombre de “La Torre de Otero”. Creo que no hay ninguno más que se llame así. Al parecer hay un bar en Madrid con tal denominación; iré un día a tomar algo por allí, si no lo cierran antes…



Espero, amable lector, que le guste mi blog. Y espero que si le gusta, lo visite con asiduidad. ¡Feliz viaje por la Torre de Otero!