Me encanta el verde del paisaje de mi
tierra. El secarral de la meseta, que hace tiempo que no veo, no me gusta. Pero
el verde necesita agua, capota de cielo gris, lluvia...que no es lo más bonito,
para mi gusto, pero es necesario para mantenerlo así. Y limpiar el ambiente.
Cuanto más llueve, menos contaminación.
Y luego, que cuando
salga el sol, luzca así.
Abrir la puerta de mi
casa y simplemente pisar el "prau", y ver el paisaje así soleado, no
tiene precio. O sí lo tiene pero lo he pagado gustosamente porque respirar
aire puro y vivir en un entorno de belleza y silencio, bien vale el precio pagado.
Pero qué solito estás tu aquí, vigilando el lugar...
Ayer tarde, nuevamente, subida andando al "Picu Sol", desde donde se aprecian unas preciosas vistas del TODO XIXÓN.
Voilà!