lunes, 10 de septiembre de 2018

Una princesa en el paraíso

La verdad que ha habido sobredosis de Leonor en la prensa local este fin de semana. Era casi imposible leer otra noticia hasta de fútbol. En casa la más contenta mi niña, que me ha pedido para este curso una cama dosel. Tiene alma de princesita, esta princesita mía nacida en el Principado de Asturias. Y me ha dicho que ella va a tocar el violonchelo mejor que Leonor. ¡Qué competitiva! Me pregunto a quién habrá salido. Y yo le he dicho que seguro que Leonor tiene muy buenos profesores, aunque los del Conservatorio Profesional de Música y Danza de Gijón son estupendos. Y ella me ha contestado que su madre no es músico y seguro que pone menos deberes que yo porque según mi hija yo soy la madre que pone más deberes del mundo mundial. Que el resto de niñas sólo tienen los deberes del cole. Y yo le he dicho que tal vez tenga razón y que seguro que la madre de Leonor no se preocupa por las mismas cosas con la misma intensidad que yo. Y le he dicho que su madre se preocupa demasiado por el aspecto físico, que no es tan importante. Y yo me preocupo más por otras cosas, así que sí; creo que mi hija tiene razón y seguro que tocará mejor el violonchelo. Todo se hereda. 

Y seguro que tendrá su cama con dosel porque eso se hace con las princesitas del Principado. Darles todo lo que piden si es importante para ellas. Eso fue exactamente lo que hicieron mis padres hicieron conmigo. 


«Fue una enorme emoción ver a los Reyes y sus hijas llegar a Covadonga»