Como no me interesan en absoluto las vidas de los futbolistas y como de la cantinela nacionalista hace tiempo que he desconectado por pura higiene mental - la salud mental hay que mantenerla huyendo de la gente tóxica por naturaleza y todo nacionalista (de cualquier tipo de nacionalismo) lo es - ignoraba esta cuestión relativa a este jugador.
Del fútbol, lo único que me interesa es que gane siempre el FC Barcelona todo lo que pueda ganar y que el Sporting mejore resultados o suba a primera división, porque eso le hace feliz a mi hijo.
Yo paso del fútbol, pero puestos a definirme, soy del Real Oviedo y del Real Madrid. ¿De qué otra cosa puedo ser yo?
Pero que gane el Sporting y el FC Barcelona.
¿Contradicción? Ninguna. Ante todo y sobre todo, soy una madre. Y si mis hijos no están felices y muy bien, yo no puedo estar bien.
Tribuna de esta semana en EL COMERCIO del catedrático Pedro Manuel Suárez-Martínez. ¡Excelente como siempre!
