sábado, 25 de septiembre de 2021

El ajedrez adaptado para no videntes

Mi hijo compitió el pasado fin de semana con un invidente. Es más engorroso pero merece la pena. Hay que dictarse mutuamente las jugadas. Es asombroso cómo algunas personas pueden superar la adversidad. ¡Chapeau! Me dio pena porque mi hijo le ganó, y eso que a priori, era favorito porque tenía más ranking ELO que mi niño. Imparable está mi querubín con los tableros.