El otro día leí un inteligente artículo,
como no podía ser de otra manera, de nuestro flamante Ministro de
Universidades. Y cuando digo flamante, quiero decir exactamente eso, porque lo
es. Y resulta que vi que tenía cuenta de Twitter. Me extrañó muchísimo que la
tuviera, así que me picó la curiosidad y entré. Y me gustó. Sí Monsieur
Castells, su cuenta de Twitter, la entiendo y me gusta. No había visto ninguna
así, y esta sí que me convence.
De esta manera sí que puede tener algún
interés para mí. Así sí.
Twitter tiene algo de red social, mucho de
información y muchíiiiiiiiisimo de patio de vecinas y estercolero. Y esto
último no me va nada.
Las peleas en el barro y en el fango, para
otros. Y otras.
Cada uno tiene que saber cuál es su lugar
en el mundo y su forma de estar en el mundo. Y la mía en Twitter será
esta.
Una cuenta muy pasiva, a diferencia de su
titular, y hecha a imagen y semejanza de la de nuestro excelso ministro de
Universidades, el ministro más "influencer" para mí.
Al menos, la fecha de creación de la misma
me servirá para recordar esta temporada de confinamiento, que no creo que se
nos olvide fácilmente porque parece casi, y sin casi, la tercera guerra mundial
vírica.
Voilà. Mi Twitter:
@SusanalvarezOt1
@manuelcastells