Me he reído mucho con esto. Y el que no lo entienda, a consultar a San Google. Me ha llevado mi tiempo hablar los idiomas que hablo y ahora, con traductores automáticos de todo tipo, parece que no hay necesidad. Pues muy bien. Que me quiten lo "bailao" y lo aprendido. Bueno, esto último sí que no. Eso jamás. Eso se lleva puesto y, ahora que lo pienso, es de lo único que yo he ido puesta en mi vida. De mis conocimientos. Ni siquiera de sidrina asturiana, que en cuanto noto que se me sube a la cabeza, corto radicalmente. Quien necesita la alegría del alcohol es porque no la lleva interiormente. Y hay que llevar la alegría en el interior, aunque se esté triste. Hacer eso es de buenos cristianos.
