Lo que más me llama la atención es que lo establezca como una celebración, el FIN DEL AMOR. Entiendo que debería ser un funeral más bien...
Cada uno/a vive el amor y la vida como quiere, y más, en el siglo XXI.
A mí, ese escenario lo que me sugiere es CAOS y desequilibrio, cuando para mi, estar enamorada y con quien amo, es lo más próximo a la PAZ, aunque haya guerra en la cama, al EQUILIBRIO, a la ARMONÍA.
Todo lo que salga de ahí, que te amen y ya no ames, que ames y a ti no, o todo el contubernio que describe me parece inestable, falto de equilibrio y que conduce al caos personal vital.
Ahora bien, si a Tamara y a muchos otros les hace felices pues a ello.
Lo dijo Jesucristo: "Estamos en este mundo para ser felices". O tratar de encontrar nuestra propia felicidad. La mía no se parece ná de ná a la de esta Tamara.
Nacida y
criada en una comunidad judía ortodoxa en el corazón de Buenos Aires, Tamara
Tenenbaum aprendió las costumbres afectivas y sexuales del mundo laico como una
antropóloga que descubre una civilización desconocida. A partir de sus estudios
de filosofía y la militancia feminista, de las conversaciones con amigos y
compañeras, de su propia experiencia e incluso de su propio cuerpo, recorre en
este libro los desafíos a los que se enfrentan hoy los y las jóvenes en el
inicio de su vida como adultos.
El
fin del amor explora qué sucede cuando el matrimonio o la pareja monógama ya no
son un objetivo vital, como lo fue para nuestros padres y abuelos. Desde el
valor de la amistad hasta la cultura del consentimiento, pasando por la
maternidad, la soltería, el poliamor, las parejas abiertas y el funcionamiento
de las tecnologías del deseo como Tinder, Tenenbaum se zambulle en el universo
de los afectos para celebrar el fin del amor romántico y proponer que, de sus
cenizas, salga un amor mejor, que haga más libres a hombres y mujeres.
Tamara Tenenbaum ha escrito poesía y ficción, ha trabajado como docente en la Universidad de Buenos Aires.