miércoles, 13 de enero de 2021

Chrissie Hynde. Inigualable


Una cosa es ser Chrissie y otra querer ser Chrissie. Imitarla o aparentar serlo por la presencia, no siéndolo. Una soberana estupidez. Cada persona es quien es y lo que es. Eso no tiene vuelta de hoja, por mucha ficción que se le quiera echar. O espejismos más bien. 
Se trata de una estupidez tan grande como que yo dijera que soy Brigitte Bardot. Pues no. 

Ya quisiera B.B. tener mi cabeza. 
No cambio el cuerpo ni la cara de BB por mi cabeza. 
Desde luego que no. 
¿Para qué? Para terminar medio "lloca" (versión astur) rodeada por animalillos de compañía después de haber estado con tropocientos tipos...
Poco y bueno para mí, en cuestión de hombres. Y morir en manos del mejor. Mala cosa sería lo contrario en el camino de la vida de esta mujer que suscribe.  
Eso ye lo mío. No lo de B.B. 

Y ahora que recuerdo, en una fiesta de "prau" en mi juventú -divino tesoro-, un chaval me dijo que yo parecía un cruce entre Sofía Mazagatos y Brigitte Bardot. 
Supongo que llevaba unos cuantos culinos de sidra de más encima y por eso...
Andaba un poco "confundío" en la noche, como aquel de Marujita de Díez, Dinio, creo que se llamaba, y decía que le confundía la noche. 
Mira que confundirme a mí con la que no distinguía entre el "candelero" y el "candelabro". ¿Qué fue de ella? Hace mucho que no está en el "candelero". Candelero, Sofía. Se dice C-A-N-D-E-L-E-R-O. 
Pues me confundió con esa y la BB. Lo que tuvo que oír una en las noches de juventú - divino tesoro-, esas que ya no volverán...Ay...

NB: Dicho esto, en broma, por supuesto, el piropo lo dijo en serio pero lo anterior está escrito en broma. Me gustó oírlo. Mucho. Nunca me han molestado esas cosas, porque un piropo no te compromete a nada. Lo oyes y punto. Jamás me han dicho nada desagradable. O molesto. Si Irene Montero los quiere prohibir, pues eso la define. Ella no es nadie para decirle a nadie lo que se le puede decir o no a otra persona. ¿Qué le habrán dicho a esa sujeta que proclama que tenemos que volver solas y borrachas a casa? Que lo diga por ella. Yo si salía con mis amigas, volvía con ellas. Idem con mi novio. Ella es la mujer de una persona capaz de realizar ejercicios de nepotismo nauseabundos. Con mente dictatorial disfrazada de pseudo-democracia. Es una mujer que no llega, ni de lejos, a lo que se debería de tener para ostentar una cartera ministerial. Eso es Irene Montero. 

Pasé olímpicamente del Dinio de verbena de prau asturiana, que me miraba con deseo, admiración y respeto, y que me alegró la noche, en la que volví sobria, con mis amigas y sin culinos de sidra de más encima porque siempre me tocaba conducir. Me alegró la noche, y me alegra este momento en que lo escribo y lo recuerdo, ahora que una es una mujer de cierta edad que ya no está en edad de merecer y el paso del tiempo ha hecho su trabajo. Cada hombre hace lo que puede para acercarse a una mujer que le gusta, y eso es legítimo y cada uno llega hasta donde llega y eso te deja la carta de decidir. Es buena cosa esa, sobre todo para una mujer. Vaya si lo es. 

¿Prohibir eso? Anda Irene, venga ya, hombre. Venga ya. Siento decirte que después de que hayan salido leyes con faltas de ortografía o que están en el punto de mira judicial por atentar precisamente contra la igualdad, al plantear la contratación solo de personal femenino, lo cual, obviamente, representa una discriminación al hombre, sinceramente, por la digna defensa de la igualdad de la mujer, para muchas de nosotras que hemos trabajado duro por lo que tenemos, y para ver que se están haciendo ese tipo de cosas en "nuestro nombre" (en el mío no, desde luego, no he votado a ese partido ni me representa en nada esa mujer) lo mejor, es que te quedaras en tu casa. Tus niños te han salido frágiles, Irene. Una crianza y crecimiento complicado tendrán. Y necesitados de cuidados maternos. A gritos, como en el parlamento, no. Sin gritar. Mejor para los infantes. Te lo digo yo, Irene. Te lo digo yo. Si hay algo de lo que puedo sentirme verdaderamente orgullosa es de lo que he traído a este mundo. 

Y muchas gracias, Dinio de "prau", estés donde estés. Me hizo feliz oír tal cosa aquella noche ¡Cómo no!. Habría que ser tonta para que eso no gustase.