viernes, 4 de diciembre de 2020

Mi opinión sobre los presupuestos

 Desde EL COMERCIO se me solicitó la opinión sobre los presupuestos del Gobierno asturiano. Recogida en EL COMERCIO de hoy. 





Mi opinión en más detalle: 

Resulta más difícil valorar unos presupuestos en esta situación porque lo sucedido con esta pandemia ha alterado todas las comparaciones posibles y ha hecho que determinados gastos sean inevitables. Con todo y con eso, es obvio el elevado – e inevitable, supongo – peso que tiene la sanidad en los mismos dado que representan el 37,28% del total.

Somos una comunidad con una elevada proporción de funcionarios, lo cual tiene un peso muy importante en el gasto total. Las deficiencias principales que encuentro son la escasa dotación para Industria, Empleo y Promoción Económica que representa tan solo el 3,23%. Es claramente insuficiente si queremos prosperar por esa vía. Y desde luego, estoy totalmente de acuerdo con quien se queja de las escasas ayudas a los autónomos. La dotación es de 100 millones cuando sus representantes señalan que tendrán pérdidas en torno a los 1.200 millones. La diferencia es brutal. ¿En qué situación se va a quedar ese colectivo? Y de Cultura ya ni hablamos. En la línea del país, dotando el 1,14% del presupuesto, habida cuenta de que eso incluye Cultura, Política Lingüística y Turismo. Me parece sencillamente una falta de respeto por la cultura.

Ahora bien, lo que más me llama la atención son los términos utilizados. Habida cuenta de que la deuda viva asturiana consolidada ha pasado de 2.675 millones en 2012 a 4.446 millones en 2020, yo no creo que eso sea endeudarse con rigor y responsabilidad. Eso es apalancar a las generaciones venideras. Me parecería un planteamiento más humilde, más digno y más honroso que se dijera que nos hemos endeudado muchísimo porque no queda otro remedio. Ahora bien, me canso de decirles a mis alumnos que hay otras formas de financiarse que no son apalancarse brutalmente, a nosotros y a nuestros hijos.