Magnífica interpretación hizo mi hijo de esa dificilísima obra pianística que es el Carnaval de Viena de Schumann. Una obra muy exigente para todo pianista. Un orgullo que representase a su conservatorio en tal evento. Era el más joven de todos los participantes. Tarde feliz la del pasado jueves.
Un muy breve fragmento de la interpretación
En el ensayo previo al concurso, calentando motores.