lunes, 15 de junio de 2020

¿Demasiado sincera?

Se trata, sin duda, de una gran obra. Al menos para mi gusto literario. Es erudita, como la propia escritora, y no es fácil de leer. Supongo que por eso se permite el lujo de salpicarla con páginas así. Me ha dejado descolocada completamente. Y sorprendida. Creo que nunca había leído esto en una escritora. En un escritor, sí. Estaba escrito en tercera persona pero podía ser una primera porque era un libro muy personal. 
Cosas de escritores. Y por lo que veo y leo, escritoras también. Que cuentan mucho. ¿Demasiado? 






Cuando leí lo de los ejercicios onanistas con esta señora del cómic y lo de los pelos en los sobacos, mamma mía, me dije, este señor no tiene los mismos gustos que Loquillo, por ejemplo, que se volvía loco por Silvie Vartan. Y hay más hombres que las prefieren rubias de ojos marrones. 
Bueno, cada hombre tiene sus gustos. Las cosas son así, y así son las cosas. Innegable. 
Suceso imposible que yo tenga pelos en los sobacos (mejor dicho axilas) o pelo teñido de rojo. Pelirrojas naturales en España, pocas, pocas...








Otro estilo de mujer: rubia de ojos oscuros y facciones suaves.