Este artículo fue publicado en EL COMERCIO el 04/12/2018
Impartía yo hace unos días mi sesión en el
Curso Experto en Bolsa y Gestión de Patrimonios del Instituto Universitario de
la Empresa, para hablar a los alumnos de la gestión de fondos de inversión. Es
evidente que no corren buenos tiempos para la inversión porque el 93% de los
fondos de inversión españoles ha registrado pérdidas en lo que va de año: los inversores llevan
perdida una media de un 3% en 2018. Las caídas afectan tanto a los fondos de Bolsa como a
los de renta fija. El mal momento de los mercados financieros ha hecho
estragos en los fondos de inversión españoles. Que el 92,6% del
dinero invertido en fondos registrados en España presente pérdidas en lo que va
de año, yo creo que no se había visto ni en los años más oscuros de la última
crisis. Son 2.061 productos de un total de 2.778 los que registran números
rojos en el ejercicio, es decir, el 74%. El porcentaje del patrimonio
gestionado que está en pérdidas es aún mayor porque los vehículos superventas han
funcionado peor que la media. En términos absolutos, los fondos de inversión
que presentan números rojos manejan un patrimonio agregado de 244.000 millones
de euros. Por término medio, los españoles que tienen un fondo de inversión
perdían un 2,97%, a 2 de noviembre. Todas las categorías de fondos llevan un
ejercicio difícil, sin excepción. La familia más numerosa, la de los fondos de
renta fija mixta (con 58.000 millones de euros acumulados y más de dos millones
de cuentas partícipes), presenta un rendimiento negativo del -1,22% en el año.
Si esto no es buena noticia, más grave me parece aún, amable
lector, que el Banco Central Europeo (BCE) haya dado la voz
de alarma por el crecimiento exponencial que ha tenido la industria de fondos
de inversión, unido a sus múltiples interconexiones con el sector bancario y
con los emisores de deuda, lo cual ha creado una amenaza que puede
desestabilizar el sistema y crear un colapso financiero. El encargado de llamar
la atención sobre los peligros que se han creado por el fuerte desarrollo de
esta industria ha sido el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, en un
discurso pronunciado recientemente en Fráncfort, en unas jornadas financieras. De Guindos recordó ante cientos de banqueros y gestores
que el patrimonio gestionado por fondos de inversión europeos se ha triplicado en la última década, hasta sumar más de 12 billones de euros. Si en 2008 sus activos gestionados
equivalían al 15% de los activos bancarios, al cierre de 2017 ya representan el
42%. Este fuerte crecimiento en términos de tamaño podría
tener importantes implicaciones en la capacidad del sistema financiero para
absorber shocks y para la situación de la economía en general. El exministro de
Economía español considera que uno de los grandes peligros que implica el gran
tamaño de la industria de fondos es que haya una retirada masiva de dinero por
parte de los clientes porque la liquidez del sistema podría verse comprometida rápidamente
si muchos particulares deciden retirar el dinero de sus fondos a la vez. El
vicepresidente del BCE dijo sentirse “seriamente preocupado sobre la reducción
de la liquidez en el sistema y el papel que puede jugar la industria de fondos
de inversión en un escenario de estresamiento de las condiciones financieras”. De
Guindos también advirtió del rápido crecimiento de los fondos cotizados (ETF,
por sus siglas en inglés), un tipo de activo similar a los fondos de inversión,
que replica la evolución de los índices de acciones (como el Ibex o el Nasdaq)
y de bonos. Está claro que cada vez están entrando más en la renta fija, y no
hay experiencia de la capacidad de liquidez que pueden ofrecer en situaciones
de estrés. Además, De Guindos alertó sobre el rápido desarrollo de fondos
alternativos que tienen unos niveles de apalancamiento que, en ocasiones, las
autoridades desconocen. Se hace obligada la mesura, amable lector, y buscar
efugio de esta situación que resulta preocupante, llamando a la responsabilidad
de los ahorradores que se han decantado por la inversión colectiva.