lunes, 29 de abril de 2019

Llegó, cantó pero NO VENCIÓ

Escuché a Bowie, que nos lo hizo pasar genial a mis amigas y a mí. A Elton John dos veces. Al Boss que se dejó la piel en el concierto. Ese día me hice fan de alguien que tampoco yo seguí tanto. De lo más humilde y entregado que he escuchado en toda mi vida. Las propinas de Bruce duraron casi tanto como el concierto. Paul, también genial. Mi querido Paul. Los Rolling a tope, a hacer que la gente se lo pasara bien y con sonido 10 sobre 10 y plena forma. 

Y viene este y parecía que estábamos en misa y en un estado policial.
Flipante. 
El comentarista de la jugada en EL COMERCIO, no tiene razón para nada. Empezando porque no distingue lo que es un bis de una propina. Si no lo cantó antes, NO ES UN BIS. Es una propina.


Los seguratas vigilando al público. 
Y afónico perdido el chaval. 
Se le han subido los premios inmerecidos a la cabeza. 
Y yo creo, que aunque tampoco hace falta saludar si no quiere, esa media reverencia de semi-Dios, lo menos es pedir disculpas por la terrible voz. ¡¡Dylan, eres cantante no filósofo!! Así que si estás afónico podías pedir disculpas por la pasta que estás cobrando. 

El comentarista dice que hubo gente que se saltó la prohibición.
Siempre ha habido niñas traviesas, incluso entre las más estudiosas. 
Las versiones que hizo de Like a rolling stone y Blowing in the wind podrían haberse titulado: dos estupendas formas de estropear tus propias canciones. Sentado a un piano acústico, para disimular más que nada, porque el piano apenas lo oí, algunos acordes nada más. Toca mejor la armónica, la verdad. 

Lo que más me gusta de Dylan es que su verdadero nombre es Zimmerman, como mi pianista favorito. Otro judío, pero Krystian, además de un músico como la copa de un pino, y un pianista exquisito, reverencia a su público. Se entrega a su público y le hace disfrutar. 


https://www.lne.es/vida-y-estilo/gente/2019/04/21/dylan-quiere-foto-concierto-gijon/2460186.html?fbclid=IwAR37L75g5J7PCBP22iARVow-zdJxvBKg3KC6yuMMpPTqws6FxFAwMirRebI