La semana pasada tuve reunión con la tutora de mi hija. Lo cierto es que estoy acostumbrada a cosas buenas ya con mi hijo, así que iba a las reuniones casi proponiendo: "¿Y si me dice sus fallos?". La reunión terminaba rápido entonces. Está feo que yo lo diga, pero así es. Mi vida como madre no puede ser más fácil ni satisfactoria.
Con la niña, casi casi lo mismo. Me dijo la tutora: "Según el resto de sus profesores, la petición sería ¿Y no podemos clonar a Elsa?"
Pues va a ser que no. Que todos somos únicos e irrepetibles.
A la salida, por el parque vecino al cole, me encontré esto. A un ciudadano ilustre. Con extracto de poema de Miguel Hernández.
