jueves, 17 de enero de 2019

Segunda oportunidad

A veces la vida da una segunda oportunidad. No siempre, pero a veces pasa y hay que aprovecharla. Me tuve que perder el estreno de esta ópera de Mozart, que además no había visto nunca y le regalé las entradas a mi madre y una amiga que la disfrutaron mucho. Finalmente conseguí entradas para la cuarta función del 22 de diciembre de "La Clemenza di Tito" y a mi madre no le importó verla por segunda vez. No tiene una música tan brillante como "La Flauta Mágica" pero es muy recomendable. La mezzo realizó una interpretación realmente espectacular. Más flojo Tito, justo el personaje principal (Alek Shrader), pero el resto de voces femeninas colosales.  En especial Daniela Mack en el papel de Sesto: un hombre. Con  la Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias y Coro de la Ópera de Oviedo.

Al finalizar la representación nos invitaron a dar un paseo por el Teatro Campoamor en su interior, y la instalación del escenario. Necesita ampliación, pero tenemos la segunda temporada de Ópera más antigua de toda España. Incluso más que la del Teatro Real. Es más antigua que la de Madrid, la nuestra. La más antigua de toda España es la del Liceo de Barcelona, pero cuando los "indepes" cojan la estelada a modo de capa de Batman y se piren de verdad, que se divorcien ya, qué pesaos, si el divorcio puede ser una decisión unilateral, pues ya, venga....cuando se piren de una vez y se queden en su República, entonces ¿cuál será la temporada de Ópera de mayor solera y pedigrí de este país, o de lo que quede de él? Pues la de la vetusta ciudad de Oviedo que noveló, muy bien la noveló, Clarín. Novelas se publican muchas. A gogó. Pero buenas de verdad, de las que se queden para leer y releer, no tantas. Y esa es una de ellas. 

A mi mami le encanta subir fotos suyas a Facebook y Whatsapp así que por mí, que no quede. Tiene 72 años. Yo firmo por llegar así. Un besín, mami. 



Personalmente, prefiero Palco que butaca de patio. 







Adoro esta chaqueta. Lo mío con ella fue amor a primera vista. Y aún dura. Qué cosas. ¡Qué milagros pasan a veces! ¿verdad? ¿Qué mujer puede no sentirse bien con una chaqueta así?






En el salón de Té del Campoamor, junto a la bella cristalera. 





Maqueta del escenario 



Como una diva sobre las tablas del escenario. 






Esta entidad bancaria busca la perfección en la gestión de carteras de valores, lo cual es loable. Yo no la busco. Ya no. Intento hacer las cosas lo mejor que puedo y asumir que no soy perfecta ni lo seré nunca.