No sé muy bien de qué trata esta película, la verdad. En general el cine francés me gusta, me interesa. Trata de temas que me importan y no suelen ser seres replicantes, ni naves espaciales, ni asesinos en serie, ni vida extraterrestre, que tal vez la haya, no digo yo que no, pero me conformo con entender la vida terrenal y a los terrestres, aunque algunos me parezcan marcianos.
Solo por el título, y desconozco el argumento, hay gente que no necesita, ni borra el historial. Ni quiere hacerlo. Y si se le mirase el historial, se vería que lo que miran, lo que verdaderamente les interesa es lo que publica su pareja. Que su interés, su obsesión, su pasión, es su pareja.
Y además, su pareja nunca mira su historial, ni su teléfono. Es de pésimo gusto además de ser un delito y algo vergonzoso.
Las personas cuyo interés en el historial es el mismo que tienen a su lado, en su cama cada noche, llevan vidas auténticas. Sin doblez. Son personas afortunadas.
No hay porqué borrar el historial. Ni espiar el historial de la pareja.
Y si se hace, algo pasa.
Nada bueno.
