sábado, 17 de octubre de 2020

¿Qué hubiera sido si...?

Viendo las cosas que suceden en nuestro país estos días, o en los últimos tiempos, me he acordado mucho de este personaje. Para quien no sepa quién es, queda debajo extracto de Wikipedia. 

Realmente, nos hubiera ido mejor. Estaría bien que alguien escribiera la historia "ficticia" de nuestro país, si no hubiéramos retornado a Fernando VII. 

Hay pueblos así. Y el nuestro lo es. Teniendo la posibilidad de un camino mejor, volvimos a lo peor. ¡Vivan las cadenas! 

También hay personas así. No me entra en la cabeza pero hay personas así. Personas que teniendo la opción de una vida mejor, de una vida más feliz, eligen seguir donde están. Aunque no estén bien. 

Con los nuestros dirían entonces, no con el francés. Tampoco íbamos a ser franceses, sino españoles mejorados, y desde luego, con una historia moderna diferente. 

En mi manera de concebir la vida, el viaje de la vida, de mejora y progreso y superación continua, no me entra en la cabeza. Me parece inaudito e inexplicable que teniendo una opción y un camino mejor, se elija algo peor. 

Pero lo hicimos. España lo hizo y aquí estamos, con ese "lindo" parlamento funcionando como funciona.


José Bonaparte (en francésJoseph BonaparteCorte, 7 de enero de 1768 - Florencia, 28 de julio de 1844), más conocido como José I BonaparteJosé Napoleón I y de forma despectiva «Pepe Botella»23456​ fue un político, diplomático y abogado francés, hermano mayor de Napoleón Bonaparte, diputado por Córcega en el Consejo de los Quinientos (1797-1799) y secretario del mismo, y nuevamente en el Cuerpo Legislativo (1799-1800), ministro plenipotenciario y miembro del Consejo de Estado (1800-1804), príncipe y gran elector del Primer Imperio Francés (1804-1806), rey de Nápoles entre el 30 de marzo de 1806 y el 5 de julio de 1808 con el nombre de José I y rey de España entre el 6 de junio de 1808 y el 11 de diciembre de 1813 con el nombre de José I, teniente general del Imperio francés (1814).

En España, su proclamación como monarca fue precipitada por el incremento de la violencia que siguió al episodio del Levantamiento del 2 de mayo y culminó un periodo de convulsiones e intrigas políticas instigadas por la estrategia del emperador Napoleón I para obtener la abdicación del trono de la dinastía reinante de Carlos IV de España asegurando la influencia y primacía del Primer Imperio Francés e incrementando la dependencia española para con los intereses políticos, económicos y militares bonapartistas, en detrimento de sus naciones enemigas, principalmente Portugal y Gran Bretaña. Sin embargo, lejos de obtener una legitimación ante la mayoría de la opinión pública y de frenar la dinámica de enfrentamiento armado, esta proclamación fue rechazada por los órganos de poder autóctonos como el Consejo de Castilla y la Junta Suprema Central y más adelante, por las Cortes reunidas en Cádiz, decidiendo la generalización del conflicto de la Guerra de la Independencia Española. En este contexto, el gobierno de José I Bonaparte, que debía distinguirse por su carácter reformista surgido de la Carta de Bayona, solo pudo ejercerse en las áreas bajo el control militar del Ejército imperial, y aunque la mayor parte de sus acciones no pudieron concretarse ante el continuo hostigamiento o fueron derogadas durante el reinado de Fernando VII de España, otras perduraron, como las mejoras de urbanismo en varias ciudades.

José Bonaparte fundó la Gran Logia Nacional de España y fue Gran Maestro del Gran Oriente de Francia789​ y del Gran Oriente de Italia[cita requerida]. Fue distinguido con la Gran Águila de la Legión de Honor.10

En España fue apodado despectivamente como Pepe Botella o Pepe Plazuela