lunes, 16 de septiembre de 2019

Paseo mateíno por Oviedo

Este fin de semana tocó paseo por mi ciudad natal, Ovetus, con el comienzo de las fiestas de San Mateo, con broche final el próximo día 21 de septiembre. Mi hijo participó en un torneo de ajedrez, con motivo de las fiestas mateínas, en un ambiente muy lúdico y en la plaza de La Corrada del Obispo, donde se encuentra ubicado mi querido Conservatorio ovetense. 

Estuvo muy bien. Me llevé a la niña de paseo. Le gustó San Mateo y Oviedo, como no podía ser de otra manera. 


Mi querido Conservatorio ovetense, Eduardo Martínez Torner. Plaza de la Corrada del Obispo.


Lugar legendario de Oviedo: "El Gato Negro". 



Esto ¿solo pasa en Oviedo?


La Catedral enfocada desde la calle Mon: lugar de bares, arriba y abajo. O sea, de juventú, divino tesoro. 




Preparando para el torneo. 






Los mejores jugadores, siempre en Mesa 1. Se clasifican por ranking...La verdad que es un juego de lo más clasista y jerárquico. Ahí está mi querubín. El de la gorra no. El otro. El de la gorra es Campeón del Open Internacional del Grupo Covadonga de este pasado verano. La lucha de cerebros no tiene que ver con la edad, sino con la potencia neuronal de cada uno. 



Vetusta = Oviedo = Ovetus 


Consistorio ovetense. 


Todas las mujeres de Oviedo, somos todas estupendas. Bueno, todas menos una. N-1,  que es engreída, de mal carácter, déspota y persona sin criterio en el uso de las múltiples armas que nos da la cosmética y la estética hoy en día a las mujeres. Y encima, ella cree que lo hace bien. Allá tú, nena. Allá tú. 



Parque de San Francisco.  




Chiringos...incluso delante de la Uni, en su edificio histórico. 


Cierre de partida rápida, a velocidad de vértigo...