No sé a usted pero a mí me toca desconectar. Le deseo muy felices vacaciones.
Estaba pensando, antes de este cierre, que con tantas noticias negativas que tenemos todos los días, y de gente mala y cutre, miro a mis hijos y pienso que comprobar que la bondad, la inteligencia y la belleza son cualidades hereditarias es algo extraordinario que contribuye a lograr un mundo mejor. Y eso me satisface enormemente y me deja una sensación de deber cumplido.
Estuvimos en Ribadesella hace unos días. Ganó el campeonato de ajedrez en su categoría, Sub 16, y en la última partida, con una niña ucraniana acogida en Asturias, al finalizar le pregunté: "¿Qué tal hijo mío?". Me contestó que le aceptó las tablas porque no pudo ganarla. Según él, "jugaba muy bien". Sabía que no necesitaba ganarla porque en el momento de esa última partida él ya tenía puntos suficientes para lograr la victoria sub-16.
Hay muchísimos días en la vida de mi hijo en los que me he sentido extraordinariamente orgullosa de él: cuando participó en el Mundial de ajedrez, cuando obtuvo el segundo premio en un concurso nacional de piano, cuando obtuvo el Premio extraordinario de Educación Primaria del ayuntamiento de Gijón, o cuando se agarraba a mi pecho largo tiempo, y me hacía tan feliz. Pero este, sin duda, es de los que más orgullosa de mi hijo me he sentido, porque refleja además su talla humana. La talla intelectual la tiene pero la humana la supera.
Es muy grande este niño. Y lo he parido yo. Y mi niña, es muy grande, aunque de momento sea pequeñita, y es una auténtica belleza, por fuera y por dentro.
Feliz veranito.
Envío con mi niña, besos al mundo y como ella dice, "buenas vibras".
Y bajo las fotos mi delicado regalo musical veraniego....Que no falle la buena música. Como se decía en el Quijote, "donde música hubiere, cosa mala no existiere".
Y aquí le dejo un regalito musical de verano. No le voy a explicar por qué esta música es elegante, bella y sublime. No, no lo voy a hacer. Hay cosas que son, en parte innatas, y también se pueden aprender. En mi caso ambas razones: por la educación de mi casa y por la formación de 10 años de Conservatorio profesional. Si no le gusta, pues siga con el reggaeton, las cutres Rosalías y rosalíos y lo que se vende por buena música y tan solo es cutre-glam. En todo caso, eso define lo que somos. Lo que comemos, lo que escuchamos, con quien nos acostamos…Todo ello nos define y nos ubica en el mundo. Estamos aquí 4 días y para ser felices. Eso sí, dada la cutrería musical de las masas es importante conservar circuitos selectos aunque sean minoritarios. Allí estaremos quienes lo sabemos valorar. Y el resto, pues a lo suyo. A la cutrez en todos los órdenes de la vida. Happy summer!
https://www.youtube.com/watch?v=oOTpQpoHHaw
