En efecto, el de Noelia A. Erausquin en el COMERCIO DOMINICAL (21/05/2023) es extraordinario.
Me siento muy honrada de que haya contado con mi opinión en esta entrevista. Parece, además, que no hay discrepancias entre lo que pienso y lo que señalan otros destacados miembros del sector bancario. Veremos qué sucede en los próximos meses.
La subida de tipos frena una recuperación más rápida de las familias y las
empresas asturianas
El aumento del euríbor resta dinamismo a la economía
en favor del control de la inflación, aunque no se constata un alza de la
morosidad
La subida de los tipos de interés es a la economía actual
como la sal a un plato, un poco puede ayudar, pero no hay que pasarse. La
analogía la hace Susana Álvarez Otero, profesora titular de Economía Financiera
de la Universidad de Oviedo, para explicar el impacto que tienen las medidas
adoptadas por el Banco Central Europeo (BCE). El regulador restringe el dinero
en circulación con el objetivo de contener la inflación y todo ello se traslada
aguas abajo a la economía real. La decisión que se toma en Fráncfort, que llega
como un efecto en cadena de la que adoptó previamente la Reserva Federal de
Estados Unidos, toca de lleno las cuentas domésticas y también las de las
empresas. El crédito se vuelve más caro y se recorta. «Los bancos cumplen el
mandato del BCE de restringirlo y, además, tienen que ser más cautelosos con la
morosidad», explica Álvarez Otero. De ahí que haya más controles de riesgos y
que compañías y familias tengan que pensarse más el hecho de endeudarse,
mientras que las que ya lo están ven cómo sus cuotas mensuales se disparan.
«El problema con los tipos es pasarse,
mi opinión es que se llegará al 4%. Subirán algo más, pero no mucho, porque lo
que arregla una cosa, empeora la otra», avanza Álvarez Otero sobre una tasa que
está en el 3,75% y ha elevado al euríbor hasta el 3,8%. «Si se pasan vamos a la
ruina total, la economía se paraliza y, en realidad, todo no se puede
solucionar con los tipos». Entre otras cosas, porque esta crisis no es
financiera, en ella entran factores muy diversos, como la guerra en Ucrania y
sus efectos, que se solucionan mal con la política monetaria. Mientras la
subida de tipos intenta frenar la inflación desbocada, se corre el riesgo de
enquistar los problemas y frenar la recuperación.
José María Salazar, presidente de la
Asociación Asturiana de Empresa Familiar (Aefas), reconoce que cada vez hay
«una mayor exigencia en el análisis de los riesgos» cuando las compañías acuden
a los bancos. No en vano, España es el país que lidera la mayor contracción del
crédito de todo el continente, según el último informe del BCE, algo que
entidades financieras y compañías atribuyen más a los costes y los riesgos que
a una restricción. «Dinero hay, pero muy caro», explican fuentes empresariales,
que aseguran también que tampoco ayuda la «preocupación que existe por la caída
del consumo».
El
Banco de España cuantifica en un 48% el aumento de las amortizaciones para
esquivar el alza de tiposAnte la subida del precio del dinero y la
incertidumbre económica, se constata un descenso de la inversión en AsturiasMás
que restricciones al crédito, empresas y bancos hablan de un mayor control de
riesgos y una menor demanda
Más requisitos
«Las condiciones del crédito se están
endureciendo, pero no porque haya dificultades en el sistema, sino porque los
tipos están altos y las empresas no están acostumbradas a esta situación»,
argumenta también el director general de la Federación Asturiana de Empresarios
(Fade), Alberto González. Los seis años que ha estado el euríbor en negativo se
notan en la percepción actual del precio del dinero.
No obstante, se dan circunstancias
particulares que ayudan a que el impacto sea menor. El vicepresidente económico
de la Cámara de Comercio de Avilés, José Manuel Vega, recuerda que la subida de
tipos aún no ha afectado a muchas familias, que no han visto actualizar sus
hipotecas, mientras que la tasa de ahorro en la región se mantiene estable y
las empresas presentan buen músculo financiero. «Muchas de ellas están con
ganas de invertir».
«Tenemos una banca bastante saneada y ni
en España ni en Asturias nos está yendo nada mal en cuestión de empleo»,
recalca, por su parte, Álvarez Otero, «no oyes a nadie quejarse de morosidad».
Antes se dejan de hacer otras cosas que pagar la hipoteca. Así lo atestigua
también el subdirector general de Caja Rural de Asturias, Silvino Urízar. «La
mora de los préstamos hipotecarios sigue siendo baja y ello a pesar de la
subida de las cuotas, lo que viene a demostrar que las familias hacen frente a
la subida del euríbor modificando sus hábitos de consumo y estableciendo nuevas
prioridades. Una de estas puede ser la amortización anticipada de su hipoteca».
Según el Banco de España, estas se han incrementado un 48%.En Banco Santander
reconocen también que el pago de préstamos de forma anticipada está aumentando
de forma exponencial. «Es una decisión sabia», considera Álvarez Otero. Lo que
ya es impensable es pasar la hipoteca de tipo variable a fijo, «hubo un tiempo
que sí, pero ahora ya no».
Pero no solo se trata de familias,
también las empresas ven cómo la subida de tipos les impacta. «Por una parte,
han tenido que adaptar sus balances a la nueva situación reestructurando los
plazos de sus deudas para no generar impagos», aclara Urízar, y, «por otra,
aquellas que disponen de liquidez para realizar nuevas inversiones se lo
piensan mientras se despejan las incertidumbres de la economía y los costes de
financiación se estabilizan».
«Lo que estamos viviendo tanto en el
mundo empresarial, como en el mundo hipotecario, es que se está produciendo una
reducción muy sustancial de la demanda de crédito, que combina las
incertidumbres económicas con el hecho de que el crédito es más caro», subrayan
desde CaixaBank. «Hay personas a las que les podían salir las cuentas antes con
los tipos de interés en negativo y ahora, con ellos entre el 3% y el 4%, pues
no les salen». Y, por tanto, esperan. «Eso es lo que estamos viendo, que está
retrayendo al mercado, no una falta de disponibilidad de crédito».
Prudencia
Otras fuentes financieras consultadas
por este periódico constatan «una frenada en Asturias de la inversión, no
dramática, pero notable». Ante la incertidumbre actual, se guarda el dinero o
se tira de recursos propios si existen. Y esta coyuntura también cambia ciertas
percepciones. «La prudencia es la característica fundamental de las nuevas
inversiones», destaca el subdirector de Caja Rural de Asturias, que argumenta
que «influyen los precios del dinero, pero también la incertidumbre general de
la economía, no solo la española sino también la que se genera a nivel
mundial».
Con ello la economía se vuelve menos dinámica. «El dinero caro
no es un aliado del crecimiento empresarial», apunta Joel García, presidente de
la patronal de la construcción CAC-Asprocon. Igualmente, Álvarez Otero ve a
Asturias «saliendo de esta situación», aunque critica que la banca no remunere
aún los depósitos ni haya bajado las comisiones, mientras se aprovecha de la
subida de tipos en sus balances