jueves, 22 de noviembre de 2018

Sala de espera

Fui al médico uno de estos días. Aunque soy miembro de MUFACE, mi elección sanitaria es la Seguridad Social. No cotizo para seguros privados. Soy funcionario público, profesora de Universidad pública, mis hijos van a un buen colegio público - y de uniforme que es lo mejor para igualarlos - y luego irán a un buen instituto. Creo en la enseñanza pública y apoyo la sanidad pública que me ha hecho mucho bien. Pero tenía una consulta urgente. No sé quién me mareó más: si el doctor "privado" o la cebra en la sala de espera. Ahí estuve un ratito con mi hija y a ella le encantó, la cebra. Afortunadamente, la consulta no era para ella. Las dolencias de los hijos, que no conozco afortunadamente porque soy una madre con mucha suerte, duelen más que las propias, con toda seguridad.