lunes, 19 de noviembre de 2018

El Puma



Qué bien lo cantaba El Puma. Y además tiene razón. Que no se juega, señoras. Que no. Que hace pupa. Si una se enamora y lo tiene claro, claríiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimo no se juega. Ahora bien, esto es cosa de dos. Yo no juego con la gente, ni me gusta que jueguen conmigo. Por otro lado, es bastante difícil engañarme. No digo que imposible, pero sí muy difícil.