viernes, 17 de junio de 2022

Precioso día el de ayer

 Terminó en el escenario del Teatro de la Laboral, subiendo a entregar un premio al mejor alumno. Algún pajarito dijo que era mi cumple y me cantaron el cumpleaños feliz. Histórico. 

Da gusto cumplir años así y, sobre todo, mirando al futuro con optimismo. Del pasado feo, de las mochilas, no quiero nada. Limpieza general, física y mental. Documentación sobrante en los contenedores de papel de la Universidad. Soy un poco como Nadal, guardando las debidas distancias. No doy por perdido un partido hasta el último minuto. Pero en el momento que lo hago, RESET. No queda nada. Lo que se dice, higiene mental. 

La Caníbal, que no mira atrás en ninguna despedida. Tampoco en la despedida de mis 51 años. La que fue amada una vez, hay que tener por seguro que lo será siempre. 

Vaya si será amada. Hasta ahí podíamos llegar que le faltase amor algún día de su vida a Susanita Otero. Hasta ahí podíamos llegar.