Así lucía el arenal de San Lorenzo esta mañana cuando he salido de tocar en la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús. Parece que el verano se va acercando. Ayer tarde aproveché para corregir exámenes de evaluación continua al sol, en la intimidad del porche de mi casa. No abuso en absoluto del sol porque no me creo lo que decía Adolfo Domínguez acerca de que la arruga es bella. Sin embargo, es bueno sintetizar un poquito de vitamina D, incluso los que ya no vamos a crecer más. Me refiero a crecer más por fuera. Por dentro, siempre lo sigo intentando. Crecer y mejorar día a día.
