sábado, 18 de noviembre de 2017

Besos de niña

Ayer, al salir de la piscina, mi hija me pidió gominolas. Se las compré. Luego me pidió besos y abrazos y me dijo: "Mami, tus besos saben mejor que las gominolas". Me eché a temblar. El amor de los hijos es algo mágico e irrepetible. Es algo grande ser madre y que tus hijos te quieran y te lo demuestren cada día. De lo más hermoso que le pueda pasar a una mujer en la vida.