Con la madre de la muchacha no tuvo hijos, pero parece ser que se pasó tres pueblos con la hija de la señora que tenía en casa.
Eso no se hace, Yves. Eso no se hace. No es el único.
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La hijastra de Yves Montand le acusa de abuso sexual
Yves Montand, personaje legendario de la canción, la escena y la vida pública francesa, acosó sexualmente durante varios años a la hija de su esposa, Simone Signoret, cuando la niña tenía entre 5 y 9 años, y volvió a intentar violarla veinte años más tarde.
A los 58 años, Catherine Allégret, la hija de Simone Signoret y el director de cine Claude Allégret, publica hoy un libro trágico, escandaloso, revelando que el segundo esposo de su madre, a quien consideraba como un padre, abusó de ella físicamente cuando apenas tenía 5 años y siguió acosándola de igual modo hasta el fin de la pubertad.
El mes de mayo pasado, el hijo mayor de Catherine Allégret, Benjamín Castaldi, publicó un libro haciendo las primeras revelaciones: «Montand acosó sexualmente a mi madre». Hoy, Catherine Allégret publica «Un mundo al revés», con esta primera confesión: «He querido salvar mi vida. Debía contarlo todo. Debía purgar mi corazón de una vez para siempre». Ella tenía 5 años cuando su madre se casó con Montand. «Yo estaba loca de amor filial por el nuevo marido de mi madre». Allégret cuenta que ese mismo año, en la soledad de la residencia familiar de Saint-Paul de Vance, Montand abusó de ella por vez primera, con caricias de carácter sexual que volvieron a repetirse en otras ocasiones, durante bastantes años. Cincuenta años más tarde, Catherine Allégret se confiesa en un libro cuya primera edición es de 60.000 ejemplares. ¿Por qué contar hoy esa historia?: «Para poner fin a un rumor horrible... hay quien ha escrito que fui la amante de Montand, el marido de mi madre... No podía continuar callando, indefinidamente». Los contactos y abusos de Montand se prolongaron durante varios años, hasta que la joven Catherine decidió rebelarse: «Un día, Montand me tiró en la calle, se lanzó sobre mí, e intentó violarme...». Allégret afirma que consiguió zafarse de este intento y, tras rechazarlo, lo interpeló con esta frase: «No vuelvas a intentarlo nunca, cabrón». Montand debutaría días más tarde en el Olimpia. Medio siglo más tarde, la hija de su esposa revela este oscuro rostro de un seductor de leyenda.
