viernes, 28 de febrero de 2020

Cuestión de fe, cuestión de foco

Ignoro la razón pero tal vez hay personas que encuentran luz en la vida adúltera. 
Pas moi.
Lo viví tan de cerca siendo niña, el calvario que eso supuso para mi madre, que no veo más que suciedad y oscuridad en ese hecho. 
Creo que es algo sucio que ensucia a las personas que lo practican. 
También hay personas que creen que porque no les ha tocado a ellos, vivir enamorados y loquitos de amor por su pareja, tal cosa no existe. 
Pues peor para ellos. 
Yo no he visto ningún átomo pero no niego su existencia. Está demostrado. 
Hay relaciones que funcionan y personas que han nacido para estar juntas y otras que no. O no tanto. 
Cuestión de suerte. Cuestión de elección. 
Y hay quien elige no creer en el amor, porque no le ha tocado o no le ha llegado lo que esperaba. 
Lo siento mucho por ellos. 

Por mucho que en tiempos de Franco, tener "querida" estuviera a la orden del día y montones de novelas nos narren eso, no quiere decir que no haya hombres felices y enamorados y viceversa. Y esto es el siglo XXI y como dice Muñoz Molina no se pueden llevar dobles vidas. Sencillamente, no se puede. Ni se debe. Hay otras opciones más dignas para el ser humano. 

Mala suerte a quien no le toque. 
O miopía. Nunca se sabe. 
Supongo que Ingmar Bergman no lo creyó hasta que le pasó. Creo que fue con la quinta esposa...