lunes, 5 de abril de 2021

Una unión bancaria con buena estrella

Este artículo fue publicado en la SECCIÓN DE ECONOMÍA 

de EL COMERCIO el 30/03/2021

Ayer comenzaron a cotizar las nuevas acciones de CaixaBank tras haber absorbido a Bankia y haberse registrado jurídicamente esta operación que supuso, el pasado viernes, la disolución de la entidad que hace 11 años se creó en torno a Caja Madrid, la primera caja de ahorros española nacida hace 320 años, y a otras seis entidades de ahorro, entre ellas Bancaja. En su momento, la creación de Bankia implicó la salida de 4.800 empleados, cifra superada unos años más tarde, en 2013, cuando el Estado intervino el banco e inyectó 24.424 millones de euros para su saneamiento. Entonces el número de salidas fue de 7.000 empleados, aunque esta cifra incluía recolocaciones o venta de filiales, como el banco que tenía en Miami, lo que redujo el ERE a unas 5.000 personas. Ambos han sido los mayores ajustes de la banca en España. En conjunto, CaixaBank y Bankia suman una plantilla de 46.762 empleados, sin tener en cuenta el grupo de seguros de la entidad de origen catalán. De esta cifra 30.812 empleados corresponden a la plantilla actual de la entidad catalana, mientras que Bankia suma 15.950 trabajadores. Ahora, tras la fusión de CaixaBank y Bankia, las salidas serán más numerosas, que las llevadas a cabo hasta ahora por ambos bancos por separado. Al margen del coste laboral que representa, la que ha surgido es una entidad reforzada y mejor preparada para afrontar el futuro. El Banco de España ha insistido recientemente en la importancia de que las fusiones sean convenientes y que no se repitan errores del pasado. La nueva CaixaBank tendrá presencia física en 299 municipios en los que no existe ninguna otra sucursal de una entidad financiera competidora, si bien podrá cerrar las oficinas en las que el número de clientes se reduzca por debajo de los 400. La nueva cotizada cerraba el precio ayer a 2,59 euros con una caída del 0,8%. Un tímido comienzo. Eso no es lo más importante, sino todo lo que viene después. A la par de su estreno en Bolsa, CaixaBank lanzó ayer lunes su primera campaña institucional de publicidad tras culminar su fusión, con el lema: “Ser los primeros en estar contigo”, con lo que pretende subrayar el liderazgo de tener activos por valor de 623.800 millones y cerca de 20 millones de clientes. 



Me quedo con una frase leída estos días a cuenta de esta operación: “la estrella de Miró luce en el cielo de Madrid”. Y eso ha sucedido al colocar su logo en los edificios más emblemáticos de Bankia este pasado fin de semana, como una de las torres Kio en el epicentro financiero de Madrid. 


Me quedo con esa imagen y con que esta unión sea una estrella bancaria, una entidad que funcione bien en un entorno complejo para las entidades bancarias y que suponga, además, un refuerzo de una unión después de tantos tiras y aflojas políticos y que tanto daño nos han hecho, con el procés y demás, y no solo a la economía catalana sino a la española. Ojalá la banca descuente desde ayer un mejor futuro para nuestro sistema bancario, para la economía española y para este país que no quisiera yo que dejara de serlo: España. Si usted es español seguro que le importa tanto como a mí.