miércoles, 14 de abril de 2021

Corazón y cabeza

"Cuando tiene que decidir el corazón es mejor que decida la cabeza"

Enrique Jardiel Poncela. 



No le quito razón, aunque hay cosas que las decide el corazón (y la entrepierna). Te tiene que gustar y tienes que sentir amor por esa persona, y eso no lo decide la cabeza. 

Lo que la cabeza decide es si esa persona te conviene y si aporta algo bueno a tu vida. Si mejora tu vida con ello.  Si esa persona saca lo mejor de ti y te convierte en tu mejor versión. El buen amor puede hacer eso. Sin duda. 

Esto último lo podemos decidir, y creo que es lo correcto y es como yo interpreto el razonamiento de Jardiel Poncela, pero sobre la base de lo que no podemos controlar, porque otras partes de nosotros mismos están decidiendo. He ahí la magia de esto. 

Si fuera así, solo cabeza, todos los matrimonios serían de conveniencia, y tal vez durarían más, pero serían menos auténticos y divertidos. A la larga, son frustrantes.  Y se esconden. El objeto no amado, no deseado, queda opacado. Lo peor de todo es que ve. Se termina viendo y se termina sabiendo. Por supuesto que sí.