Dice que le da rabia que no sepamos vendernos. Bueno, no todos. No todos. Hay una persona, por lo menos una, que se ha vendido muy bien. Fue a hacer un doctorado a un país que no es para doctorarse bien, precisamente; no se doctoró, bebió mucho tequila, mostró los senos para el pintor y.....a lo máximo.
Si eso no es venderse bien, que baje Dios y lo vea.
Mis padres me enseñaron que la mejor vía de ascenso y prosperidad en la vida eran los libros. Creo que no se equivocaron, pero por lo anteriormente comentado, es evidente que hay otros caminos que yo he desechado por la educación y formación recibida en mi casa y en un colegio de monjas exclusivamente femenino durante 13 años de mi vida.
Ha sido la mía una vida pegada a los libros y ya soy demasiado mayor para cambiar. Además me gusta que sea así. Son mis compañeros de viaje.
Susanita tiene un ratón y un libro siempre en la mano. Libro de los que se tocan. Paso de cacharritos digitales para algo placentero como es la lectura.
Tengo muchas ganas de ver esta peli que parece desternillante y grabada por aquí. Habrá que agradecerlo a Fernández Armero.
«Me da rabia que los asturianos no sepan venderse»
