Qué cabeza tiene Rosa Belmonte. Qué cabeza. Si fuera hombre, me enamoraría de ella, pero no puede ser. Soy heterosexual y, además, ya estoy enamorada, así que es SUCESO IMPOSIBLE enamorarse de otra persona cuando una ya lo está.
El idioma Montero | El Comercio
El idioma Montero
A LA ÚLTIMA
Es curioso que Yoshiro Mori, un alto cargo de Tokio 2020 (con suerte, 2021) no conozca a María Jesús Montero. La ha clavado. Mori se ha metido en un lío porque al debatirse en el comité olímpico el aumento de las mujeres en la ejecutiva dijo que si se hiciera eso las reuniones serían interminables y si una pide la palabra, como tienen mucha rivalidad, las otras pensarán que también tienen que hablar. «Tenemos que asegurarnos de que su tiempo se restrinja un poco, les es difícil terminar sus intervenciones y es molesto». Yo sólo hablo si me pagan, pero no me ofendo. Porque pienso en María Jesús Montero y entiendo a este japonés metiendo la pata.
Tú dices «Voy a bajar la basura». Cinco palabras que expresan de manera clara una acción. En el idioma de Montero la mayor, sería: «Me encamino hacia la puerta de la casa con la bolsa de basura en la mano derecha para dirigirme al ascensor, darle al 0 y, una vez abajo, ir al cuarto de los contenedores para depositar los detritus familiares. Una vez cumplida esta misión, volveré a subir a casa». Casi 50. Que, si cobrara por palabra, lo entendería, pero qué mujer. Ahora, tiene gracia. Después de disculpar la nueva 'iglesiada' (el déficit democrático de España, que él tan bien representa) y justificarlo con que estamos en campaña electoral (o sea, mentimos y exageramos normalmente, pero en campaña más), después de eso, digo, aclara que el vicepresidente no habló del asunto en el Consejo de Ministros. Y tampoco de ningún otro asunto. Es que te tienes que reír. Está en el Consejo de Ministros como Chelo García Cortés en 'Sálvame'.
Vive para dar titulares y que caigamos en la trampa de hablar de él. Para no dar un palo al agua, sólo a España.
